Estadio Víctor Manuel Reyna, Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, México ante una buena entrada, viernes 20 de Julio del 2012
Alan Pulido fue el autor del primer gol del nuevo torneo
Juninho anotó y dio pase para gol en la victoria felina
Las peticiones de espectáculo fueron escuchadas por Ricardo Ferretti y los Tigres de la UANL. Los felinos norteños se metieron a la selva de Chiapas para despedazar a los Jaguares al son de 4-0 con una demostración impecable en la definición.
Peor inicio no podía haber tenido Jaguares, cuyo estratega José Guadalupe Cruz miró impávido como caían uno a uno los primeros cuatro goles en contra del torneo en 45 minutos, justo en el semestre donde el equipo del sureste celebra su década de existencia.
A los seis minutos el juvenil de 21 años Alan Pulido, quien no fue convocado para lista final de los Juegos Olímpicos, aprovechó un rebote del balón en el travesaño para meter inaugurar el marcador y el primer gol de la Liga MX.
El tanto se logró en parte por un error del portero Édgar Hernández quien salió mal en el tiro de esquina y facilitó el remate de Hugo Ayala al travesaño.
Jaguares no le gana a los felinos de Nuevo León en el Estadio Víctor Manuel Reyna desde el Clausura 2008 y hoy sumó una derrota más.
De Brasil para México, Juninho también puso su talento al servicio del espectáculo que brindó Tigres en la cancha chiapaneca. Al minuto 19 prendió el balón con una volea y lo anidó para poner el 2-0 parcial.
El gol que marcó la debacle y puso una losa sobre los Jaguares vino de los pies de Luca Lobos, quien al 35’ mandó un disparo de larga distancia pero el zaguero Omar Flores metió la cabeza y mandó al fondo de las redes para el 3-0.
Las garras felinas seguían despedazando a su rival al grado que Lobos mandó un disparo al travesaño y Elías Hernández trató de anotar un gol de cabeza pero el arquero Hernández lo evitó. Todo en el primer tiempo.
La cereza del pastel fue una combinación entre Juninho y Manuel Viniegra. El defensa levantó el balón por encima de tres defensas para su compañero, quien dentro del área sólo fulminó al arquero que no sabía cómo detener a la fiera.
El resto del juego fue un duelo en el que ambos modificaron sus piezas, los visitantes para asegurar el marcador y los locales en busca de un gol de consolación que nunca llegó. El público chiapaneco se resignó a ver el espectáculo de Tigres.